Magnifico lugar que sorprende por la paz interior que allí se respira. Es un remanso de silencio donde a las piedras, cuadros y muebles clásicos de la zona les han colocado unos extraños compañeros de acero inoxidable que, además, dan luz, unos tubos de hierro de colores y una multitud de colores que ¡increíble! dan sosiego.
Su restaurante no nos deja de sorprender en cada momento con sus «colores, olores y sabores» y en su SPA podrás dejar que tus sentidos encuentren su tercera dimensión.
El paisaje selvático y caribeño que lo circunda te envolverá y esperarás que llegue la hora del dormir para descansar de verdad y cuando duermas, la hora del despertar que será acompañada por un millón de sonidos provenientes de la selva circundante y el rumor del mar caribe que mora alrededor. Si quieres descansar, leer, pensar, disfrutar… este es tu sitio, donde el silencio se escucha.